Hola, mi nombre es Amanda y aquí va mi historia…
Soy una chica de 29 años estudie la carrera de Ciencias políticas, soy una chica muy divertida pero un poco tímida, en ciertas ocasiones me cuesta demasiado hacer amistades pero cuando logro conectar con alguien en particular muy difícilmente se desprenden de mí.
Voy directo al grano, quiero platicarles una de las Historias que más han marcado mi vida, sucedió hace aproximadamente 1 año, él era un hombre no muy guapo y tampoco de cuerpo escultural, más grande que yo como por 4 años, lo que me llamo la atención de él es que en mi vida jamás he vuelto a conocer un hombre como el, tenía algo tan especial que ni siquiera sé cómo expresarlo, un hombre demasiado inteligente, educado y trabajador. Las cualidades necesarias para estar conmigo aparte de todo era súper detallista conmigo y algo que muy pocos hombres pueden llegar a tener; el aparte de estar pendiente de mí siempre estaba atento de mi familia por si necesitábamos algo.
Nos conocimos por amigos en común, ese día el solo se acercó a saludarme y a decirme lo bonita que me veía y de ahí empezó todo, platicamos hasta que me di cuenta que era demasiado tarde y tenía que salir literal como “Cenicienta” corriendo de vuelta a casa, pero obviamente sin antes pasarle mi whatsapp, quien lo diría después de haber vivido una relación tan tormentosa en mi pasado, había llegado alguien que de verdad me movía el tapete jajaja. Y así pasaron 2 meses entre salidas y detalles hasta que se llegó el día que tanto había esperado, me pidió que fuéramos novios y claro que dije ¡Sí! Literal me veía con el ramo de novia en mis manos jajaja paso el tiempo, vivíamos en la misma ciudad pero el venia de intercambio en un trabajo temporal pues es Ingeniero Civil, nuestro noviazgo tenía ya 3 meses cuando me dio la noticia que tenía que regresar a su Ciudad natal, porque había concluido el trabajo, así que regreso.
Nuestro amor seguía creciendo aun a distancia, nos veíamos por video llamada Casi a diario para no olvidarnos uno del otro realmente era muy feliz, venía a verme no muy seguido por que él está muy retirado de donde yo estoy, pero las veces que estaba aquí conmigo juro eran inigualables, aún tengo el olor de esos días, pues eran tiempos lluviosos imposibles de olvidar. Daba por hecho que sería el hombre de mi vida. Hasta que un día no se ni siquiera como paso simplemente lo sentía un poco distante el siempre dijo que era por trabajo, se sentía presionado y ya era menos las veces que podía venir a verme, pero Jamás dejo de llamarme y estar pendiente de mí, lamentablemente en un ataque de locura que me dio, quise terminar la relación porque yo sentía que ya no era lo mismo, aún recuerdo que deje un mensaje en su Messenger que ya no quería estar más con él por su falta de tiempo (la verdad era una tontería, solo me estaba formando chaquetas mentales) pero aun así decidí terminar la relación, aunque por dentro juraba y deseaba que él no me dejara ir, simplemente quería que no renunciará a mí. Pasaron unas horas después de mi mensaje y él no lo veía y de repente entro una llamada a mi teléfono y obvio ¿quién creen que era? Exacto era el, hablándome como si nada al principio me causó extrañeza, él estaba demasiado feliz diciéndome que por fin tenía unos días libres para venir a verme, claro que en ese momento el ni siquiera había visto el mensaje y yo por dentro deseaba regresar el tiempo y jamás haberlo escrito.
Colgamos y No mencione el tema sobre ese mensaje, y después de unos minutos apareció el temido “VISTO” en cuanto lo vi, lo llame y claro no respondió a mis llamadas. Sus palabras textuales en el mensaje fueron “Te amo demasiado, y sé que no te doy la atención que quieres o deseas aun a pesar que me desvivo por estar bien contigo, mis intenciones jamás han sido dañar tu corazón y si tu decisión es esta, tu sabes que yo la respetare. Cuídate y gracias por todo” y ¡PUM! Literal escuchaba como mi corazón se quebraba en mil pedazos, hice de todo por recuperarlo, lo hostigue con mil llamadas, mil perdones (Que claro fue otra idea tonta que pude tener) termino harto de mí y yo sufriendo a solas por querer recuperar todo lo que no había valorado, solo por un arranque de inmadurez, que les puedo decir; jamás volví a verlo pero hasta la fecha no hay día que no recuerde lo bonito de nuestra relación un hombre inigualable, de esas versiones que no vuelven a salir, muchas ocasiones son ellos los que no nos valoran , pero déjenme decirles que también muchas ocasiones somos nosotros quien no los valoramos. Lo más simple hubiera sido hablar mi inquietud con él y todos estaríamos felices, tal vez.
Fue una experiencia única y hermosa, de la cual siempre estaré agradecida con dios por darme La oportunidad de conocerlo aun que hoy no este conmigo, sé que quien este a su lado será de las mujeres más felices... Mujeres , los hombres no están aquí para adivinar nuestros pensamientos o nuestro sentir dejémonos ya de esa ideas tan tontas, dios nos regaló una boca para hablar y expresar nuestro sentir, utilicémosla para así no irnos por un arranque solamente, también enseñémonos a valorarlos que existen hombres que valen oro.
AVE FÉNIX
Amanda nos regalo su historia de vida que mas la ha marcado, ella menciona el no darle el valor suficiente a su relación, pues era un poco inmadura, en ocasiones claro que existen hombres que saben darse su lugar y esta vez le toco uno a ella, tenemos que entender desde un principio que si aceptamos un amor a distancia, también aceptamos todas y cada una de las cosas que se vengan. Un amor a distancia es difícil pero no imposible siempre y cuando las dos partes tengan la suficiente madurez de afrontarlo.
¿Tu alguna vez has tenido una relación a distancia?
El nombre de la persona que nos compartió su historia es ANÓNIMA, es importante recalcar que se utilizo un nombre diferente para cuidar su anonimato.
